Segunda jornada, nos estrenábamos en el Tomillar, en fiestas de Alovera con mucha gente, contra un equipo que le habíamos ganado en el último partido de la temporada pasada, contra el Yuncos, un equipo rocoso de mitad de tabla que conocía sus puntos fuertes y los exploto y sabia a lo que jugaba. Cosa que algunos de los nuestros sabían y otros no, algo que se noto, el Yuncos no hizo mal partido pero la tarde nuestra fue un desastre. Se junto que la noche se había hecho larga para mas de uno que llevaba varias noches trasnochando y el mal juego, las pocas ganas que se vieron y la falta de profundidad que notamos en el empate contra el Talavera, se notaron las bajas que aun hay pero estuvimos muy grises. Quitando el corazón que le pusimos los últimos 10 minutos cuando recortamos diferencias a través de Torres y un cabezazo de Maki que estuvo a punto de darnos un punto, pero ellos realmente tuvieron dos claras y las hicieron. La primera en 77 en un gol que hay que decir que es dudoso, por el que la empujaba en línea de gol creo que estaba adelantado y un segundo gol en el 84, que aunque siento impotencia porque casi lo saco realmente era muy difícil pararlo.
En conclusión al equipo se le vio peor, que en Talavera aunque las circunstancias no acompañaban, creo que necesitamos tiempo para adaptarnos y estas dos semanas han sido un poco de rodaje, creo que en las próximas jornadas empieza realmente el equipo al completo a funcionar y comenzamos de verdad.